Lo ha escrito Toti Martinez de Lezea en su espacio virtual y comparto plenamente su opinión porque me siento plenamente identificado:
Un tipo prepotente que se las da de muy inteligente, intelectual, superior y exquisito ha dicho que somos gilipollas quienes felicitamos el solsticio de invierno en lugar de las Navidades.
Qué queréis que os diga, personalmente os deseo un feliz solsticio al igual que lo hacían nuestros antepasados antes de que se inventaran la fecha de nacimiento de Jesús para que coincidiera precisamente con esta época del año, que Francisco de Asís montara el primer belén en el siglo XIII, que los alemanes empezaran a adornar árboles en el XVI, que tanto Santa Claus como los Reyes Magos y sus regalos se hicieran costumbre en el XIX, que a los productores de vino españoles se les ocurriera lo de las doce uvas para dar salida al exceso de las mismas a comienzos del XX ...
En fin, que, al contrario que él, nosotros respetamos las creencias, costumbres, gustos de cada cual. Y si quisiéramos devolverle el insulto, echaríamos mano del diccionario de sinónimos de la RAE, de la cual hace parte, pero nos limitaremos a llamarlo "groscon", un calificativo que se ha inventado nuestra Toti en su última novela y que viene a ser: tonto del culo para arriba y del culo para abajo, es decir un tonto integral.