El Colectivo de Presos de ETA (EPPK) ha anunciado que se suma al Acuerdo de Gernika suscrito el pasado año y expresa su"compromiso total con impulsar el proceso democrático hasta el final". Bien.
Y a la vez señalan: "Por encima de los límites y los obstáculos de los estados que nos tienen cautivos, EPPK manifiesta su compromiso firme de empujar para avanzar en el proceso democrático". Mal. Ni están cautivos, ni hay ningún proceso democrático que realizar si no es el que ellos tienen que recorrer y asumir.
Entiendo que necesitan tiempo, que van dando pasitos, un poco lentos eso sí, pero que eso no implica que los demás tengamos que movernos ni un pelo. Son ellos, y solamente ellos los que tienen que ponerse al día. Son ellos y solamente ellos los que tienen que asumir públicamente lo que los demás hicimos hace ya treinta años. Son ellos y solamente ellos los que quedan por decir alto y claro que su pasado ha sido un error catastrófico para este país y los que tienen que gritar, también alto y claro, que todo empieza por exigir a ETA su disolución.
Y hasta entonces, todo lo que hagan son pasitos, de los que nos congratulamos en parte, pero que solo suponen la esperanza de que a no mucho tardar, recorran de una puta vez todo el resto del recorrido que les queda. Y mientras tanto, que no pidan reconocimiento alguno en el campo demócrata porque, simplemente, no se lo merecen.
