No deja de ser curioso lo que está pasando en Sopelana con la policía local.
Resulta que lo que hasta hace poquito era absolutamente bochornoso e ilegal para el sector de la izquierda radical hoy en el gobierno, ahora no solo es legal, sino también necesario.
Para los actuales representantes del nacionalismo moderado, actuar como actuaron en el pasado, hoy en día es hacerlo sin transparencia y de "malas formas".
Para la representante del PP lo que antes estaba bien, ahora no, simplemente, probablemente, porque no puede "sintonizar" con luz y taquígrafos con el actual equipo de gobierno.
Para el PSE-EE, ver la realidad desde el mismo lugar, antes y ahora, es decir, una distanciada y cómoda oposición, le permite no tener que mojarse más que lo justo y necesario.
Y los que no han cambiado nada son los del sindicato. Si antes no les pareció bien ahora tampoco. Pero no por tema legal, que ellos saben que lo es, ni por las formas, acostumbrados a reuniones paralelas y sin mucha publicidad. No les parece bien porque no es el que ellos quieren. Y eso pica.
En resumen, que es saludable y conveniente ver las mismas realidades con distintas lentes antes de opinar. Las del gobierno y las de la oposición. Se ve distinto, aunque sepamos que la realidad sigue siendo parecida.
