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jueves, 18 de abril de 2013

Los jugadores del Athletic, del Bilbao Basket o de Tanganika, el amor a los colores y la pasta gansa.

Comprobar que todavía hay gente que se cree eso de que los jugadores profesionales, ya sean de futbol, basket o balonmano, sienten amor por los colores y bla, bla, bla, y que la pasta la ponen en un lugar secundario ... me produce sorpresa no exenta de ganas de animarles a que aterricen en una realidad que nada tiene que ver con lo que defienden. La pela es la pela para catalanes, vascos o tegucigalpenses.

Ni en el Athletic los jugadores son diferentes al resto, y eso de ser "vascos" lo único que consigue es que realicen, en general, un último tirón de cuerda antes de romperla, pidiendo más pelas, aprovechándose de la disminuida alternativa en el mercado por auto limitaciones propias. Y así, vemos como esta temporada son varios los que ya han roto y/o romperán  amarras con el club de sus amores por el único y desolador motivo de la pasta gansa. Ninguna sorpresa.

En el Bilbao Basket, lo que quieren este año es cobrar. Cobrar lo que ya tenían pactado y que, debido a las gestiones del que mandan en el Club, bastante nefastas durante estos últimos años, se ha puesto claramente en peligro esta temporada.

Lo del Uxue parece ya confirmarse que fue una broma ... macabra, y ya van varias. No hay pasta y creo que, entre los que se dieron la mano en su momento, la posibilidad de llegar a esta situación, no era, para nada, descartable.

No hay muchos instrumentos en una sociedad anónima, aunque sea deportiva, para mandar de "vacaciones" al máximo accionista de la entidad, que puede ver como se muere de inanición "su" club, mientras sus arcas privadas siguen creciendo, que puede rasgarse las vestiduras pero alguna culpa tendrá, si no toda, en la horrible gestión del club.

En fin, alguna formula habrá que encontrar en un momento donde "mamá administración" tampoco puede andarse soltando gallina como en los viejos tiempos. Y aunque en esta ocasión la Dipu saque al club de la UVI, en cuanto los guipuzcoanos se enteren y empiecen a protestar por las diferencias de trato de las diferentes administraciones, aunque todas sean muy vascas, y los partidos de la oposición pidan saber cómo se gasta el dinero público, el tifostio ya está montado. ¡Al tiempo!