El PP ha convertido el asunto Rivera en un fracaso propio cuando realmente es un éxito para el País

viernes, 29 de septiembre de 2017

Esto va de democracia, nos dicen los independentistas. Pero no es cierto, esto va de nacionalismo, puro y duro.

Con una asombrosa candidez, Puigdemont confesó el pasado domingo que al carecer de la fuerza necesaria en el Parlamento, se veía obligado a forzar la ley desde la calle y mediante la presión popular. 
Convertirse en víctima para justificar la ilegalidad y asaltar la democracia en nombre de ese victimismo es puro fascismo; Europa lo ha vivido mil y una veces. 
Esto va de democracia, nos dicen los independentistas. Pero no es cierto, esto va de nacionalismo, puro y duro, y del imperdonable intento de romper la democracia y la convivencia. @jitorreblanca