Declaraciones del exprimer ministro francés Manuek Valls hoy en "El País" |
Si en estos momentos de crisis vivencial europea, los estados nación más antiguos —y hay tres históricos, Francia, Inglaterra y España— se deshacen, es Europa la que se deshará. Es el fin de lo que es Europa. Porque mañana serán Italia del norte, Escocia, Bélgica ... Y quizás luego en Francia. Cada país tiene sus historias. Hay que respetarlas y no se pueden comparar.
Para el conjunto del estado español una de sus fuerzas es tener grandes regiones con sus identidades propias, que son además fuertes a nivel económico. Es la fuerza de España. Si una de estas regiones se va, será un desastre para Europa y para España, y no sería un futuro de prosperidad para una Cataluña que siempre se ha visto, en estos siglos, dentro del conjunto español.
Por eso pienso que, respetando el debate político español, un dirigente político europeo no puede refugiarse en la hipocresía de decir que es un debate interno en España. Las consecuencias no serían sólo para Cataluña o por España, serían para Europa y para el país que tiene la frontera con España y Cataluña.