... porque si dejamos al algoritmo trabajar solo, solo verá clientes y accionistas y no verá ciudadanos.
Solo trabajará para conseguir más clics de apoyo a su dueño y señor -el de TESLA, X y la IA yanqui- y nosotros lo que necesitamos es apostar por una tecnología humanista, y no la que genera miedos y, sobre todo, tensión geopolítica.
No solo se trata de un asunto económico, sino también de soberanía.
De vez en cuando, una buena noticia al amanecer, permite afrontar el resto del día con más optimismo. Y ayer, según indica la prensa de hoy, Ursula von der Leyen expresó su deseo de que el Viejo Continente no quede rezagado en la competición mundial por la inteligencia artificial, deseando que Europa sea uno de los continentes líderes en este sector innovador y que adoptemos un modo de vida en que la IA tenga una mayor relevancia en nuestro entorno.
Solo trabajará para conseguir más clics de apoyo a su dueño y señor -el de TESLA, X y la IA yanqui- y nosotros lo que necesitamos es apostar por una tecnología humanista, y no la que genera miedos y, sobre todo, tensión geopolítica.
No solo se trata de un asunto económico, sino también de soberanía.
De vez en cuando, una buena noticia al amanecer, permite afrontar el resto del día con más optimismo. Y ayer, según indica la prensa de hoy, Ursula von der Leyen expresó su deseo de que el Viejo Continente no quede rezagado en la competición mundial por la inteligencia artificial, deseando que Europa sea uno de los continentes líderes en este sector innovador y que adoptemos un modo de vida en que la IA tenga una mayor relevancia en nuestro entorno.
Al pulso entre Estados Unidos y China, simbolizado por el duelo entre ChatGPT y DeepSeek, debe de unirse la UE manifestando su deseo de apoyar una tercera vía que permita un acceso equitativo para todos los continentes y así poder evitar que los Estados europeos quedemos como meros segundones ante esta transformación.