Basada en la historia real de María Thompson Fisher, una mujer que pertenecía a Chickasaw, lo que conocemos hoy como Oklahoma, y que a pesar de las desigualdades sociales y raciales de la época, puso sus miras hacia Broadway y no dejó de perseguir sus pasiones hasta el último de sus días y conseguir lo que para ella era su sueño.
La vida de Mary Thompson Fisher, una nativa americana de la tribu Chickasaw que adquirió popularidad como actriz en los años 30, absorbe y atrapa gracias a la cantidad de conflictos que plantea: las diferencias raciales y la discriminación y el odio que conllevan, la libertad de la mujer en un entorno hostil... aunque a la película le falta un poquito de garra, uno se alegra cuando de vez en cuando se estrenan en España pequeñas joyas, cintas verdaderamente valiosas, cuya modestia presupuestaria retrae a los exhibidores y dificulta su visibilidad en la cartelera nacional. Es el caso de "Mi nombre es Te Ata", una cinta encantadora para ver en familia.