La situación es dolorosamente clara y evidente.
Podemos soñar y debemos seguir soñando con todo,
pero en ese ínterin que llamamos presente
estamos obligados a defender al menos
lo poco o "no tan poco" de lo conseguido hasta ahora.
Y esto quiero decir, por ejemplo, que en estos momentos
hay que apoyar a Biden en EEUU, a Boric en Chile,
a Lula en Brasil, al papa Francisco en la Iglesia,
... ... ... y al gobierno de coalición en España.
No hay que apoyarlos porque nos representen plenamente
ni porque constituyan un "mal menor";
hay que apoyarlos porque introducen, porque han introducido,
porque pueden introducir "bienes pequeños",
el único camino posible contra las apremiantes amenazas
de la peor derecha de los últimos ochenta años.
Se trata, sí, de obstaculizar el paso y de utilizar el tiempo adicional
para construir, a fuerza de bienes pequeños y movilizaciones mayores,
una alternativa duradera.
Y esto, así de claro y contundente,
es lo que tiene que entender el sector afín a Pablo Iglesias.
Espero y deseo que de las "hostias electorales"
que se dieron en Andalucía y Madrid
algo hayan aprendido.
¡Ojalá!
blogs.publico.es/dominiopublico//sumar-el-unico-camino
Podemos soñar y debemos seguir soñando con todo,
pero en ese ínterin que llamamos presente
estamos obligados a defender al menos
lo poco o "no tan poco" de lo conseguido hasta ahora.
Y esto quiero decir, por ejemplo, que en estos momentos
hay que apoyar a Biden en EEUU, a Boric en Chile,
a Lula en Brasil, al papa Francisco en la Iglesia,
... ... ... y al gobierno de coalición en España.
No hay que apoyarlos porque nos representen plenamente
ni porque constituyan un "mal menor";
hay que apoyarlos porque introducen, porque han introducido,
porque pueden introducir "bienes pequeños",
el único camino posible contra las apremiantes amenazas
de la peor derecha de los últimos ochenta años.
Se trata, sí, de obstaculizar el paso y de utilizar el tiempo adicional
para construir, a fuerza de bienes pequeños y movilizaciones mayores,
una alternativa duradera.
Y esto, así de claro y contundente,
es lo que tiene que entender el sector afín a Pablo Iglesias.
Espero y deseo que de las "hostias electorales"
que se dieron en Andalucía y Madrid
algo hayan aprendido.
¡Ojalá!
