Me parece normal y hasta lógico que tras la bomba Santos Cerdán, las criticas se ceben contra los corruptibles y contra Pedro Sánchez.
Pero algún día habrá que hablar, también, de los corruptores que son grandes empresas que cotizan en el IBEX y son al parecer intocables.

sábado, 23 de julio de 2016

El feroz discurso de Trump rememora ecos del pasado que no se pueden ignorar


En efecto, en tiempos extraordinarios se necesitan medidas extraordinarias. ¿Cuándo hemos oído esto antes? Trump lanzó los típicos mensajes de la derecha tradicional: prometió frenar la inmigración ilegal con la construcción de un muro en la frontera con México, defendió el derecho a poseer y llevar armas, y contentó a los cristianos evangélicos. Tampoco faltaron los mensajes anticuados relativos a la necesidad de impulsar políticas de mano dura contra los delincuentes: "soy el candidato de la ley y el orden".
Si bien en el pasado Trump, de setenta años, ya había expresado estas ideas de forma incoherente y confusa en sus mítines, en esta ocasión lo hizo de una forma mucho más disciplinada, precisa y comedida. Y, por esta razón, oírlas fue todavía más escalofriante.