Se acaba la campaña y en Sope parece que la etapa PNV-Hermosilla ha finalizado. Y al cambiar de candidato en la campaña parece que el PNV se promueve a la alcaldía como si fuese un nuevo partido el que se presenta. No hemos podido ver ningún apoyo del actual alcalde al eterno candidato, que por cierto, si pierde, no sería la primera vez.
Hermosilla ha sido un personaje gris, oscuro, que no se ha dado a conocer y, los que lo conocen, precisamente, no es para bien. Ascendió a los cielos de la alcaldía sin competencia interna. No interesaba en ese momento. Pero ahora el ruido de las grúas de la construcción lo han esquinado descaradamente al grito de "No eres de los nuestros, ¿Qué te esperabas?".
Actuó sin piedad con quienes le molestaban en su carrera ascendente. Y su caída es fruto de las mismas herramientas que él mismo utilizó. Ni un gramo de pena, compasión, ni na. Solo una preguntita: ¿A que jode, eh?