El PP ha convertido el asunto Rivera en un fracaso propio cuando realmente es un éxito para el País

viernes, 19 de diciembre de 2008

La Vuelta, las ratas y la Euskadi futbolera

Ayer estuve en el coche mas tiempo que lo habitual y escuche varias noticias que no me resigno a dejar de comentar.

La primera se refire al recorrido de la Vuelta 2009. Empieza en los Paises Bajos. Desde el punto de vista deportivo me parece simplemente una chorrada. Comercialmente me imagino que será para los dueños de la Vuelta, puesto que tonto no son, económicamente super rentable, pero lo que más me interesa a mí es desde el punto de vista político. Nadie se plantea allí que este desembarco bicicletero suponga una segunda invasión hispánica al estilo de la de Felipe II ni se siente invadidos por ella, ni los respectivos parlamentos  se manifestaran contrarios al jolgorio que suponga el ir i venir de la caravana publicitaria. Simplemente no mezclan churras con merinas. Algo deberíamos de aprender aquí de todo ello.

En segundo lugar, la invasión de ratas, de pulgas e incluso de avisperos que perturban sensiblemente la labor de los juzgados de varias localidades de la piel de toro suponen una inigualable metáfora sobre la situación judicial española. Triste, lamentable y cierta. Por cierto, me parece que otro tema judicial que raya con el esperpento es el sorteo que se han montado en los juzgados de Bilbao para poder asistir a las sesiones del juicio al Lehendakari. ¡Que ganas de hacerse notar y de hacer el ridículo!

La tercera y última por hoy se refiere a la supresión definitiva del partido de la selección de Euskadi por el acojono de los deportistas ante los señores, y señoras, de las mesas con ikurriña y siglas diversas. ¡Lamentable pero cierto! Y yo me pregunto: Estos chicos que no tienen ni puta idea de lo que firmaron, pero que han sido incapaces de reconocer su error, que se les hace el culo limonada cuando les llaman de la seleccion de España, y a cuya denominación no ponen condiciones terminológicas, ¿Se negarán a partir de ahora, por ejemplo, a realizar entrevistas en radio Euskadi hasta que se llame Euskal Herria? ¿O no hay huevos para ser "consecuentes" hasta el final? Probablemente, tampoco.