El alto, el fuego en Gaza, que de momento parece estarse manteniendo no tiene detrás un proceso ni mecanismos para prevenir ataques y avances, israelíes, ni para forzar al ejército israelí a retirarse.
Mientras Trump habla del éxito del plan de paz, los israelíes mantienen los dedos en los gatillos de armas que siguen apuntadas a la población civil de Gaza. (martin.gak)

viernes, 4 de marzo de 2016

No tengo nada que aplaudir a Otegi.

Nada de nada. 
Porque cambiar de opinión y propugnar el cese de la violencia no es de héroes, es de seres humanos. Y la humanidad debería ser intrínseca a las personas. 
Si hay que aplaudirla es que nuestra sociedad está enferma. Por eso, entiéndanme y siento si les molesto, pero yo no tengo nada que aplaudir a Otegi.