Me llamaba la atención hace unos días que el señor Ortuzar se rasgase las vestiduras porque algún grupo político ajeno al suyo aspirase a ocupar democráticamente los puestos que ahora ellos ocupan. Les acusaba nada más y nada menos que de querer practicar el "quítate tú para ponerme yo".
¡La protesta del presidente peneuvista rebosa tontería! ¡Como si no fuese lo más lógico y razonable de cualquier partido político que se precie, el intentar conseguir que la ciudadanía le aúpe a las máximas responsabilidades políticas devolviendo a la oposición a los "otros" partidos.
Su protesta "infantiloide" falla por la base. Porque esa máxima se puede aplicar a todos los partidos que participan en el juego democrático. Patxi López le quitó al PNV de la presidencia de Ajuria Enea. ¡Lógico! El PNV le acaba de quitar a Javier Maroto de la Alcaldía de Vitoria. ¡Lógico! Y Pedro Sánchez está exactamente en eso: en quitar a Rajoy para ponerse él.