Es urgente que la Unión Europea refuerce su compromiso de resolver la crisis de personas refugiadas. Los próximos 17 y 18 de marzo el Consejo Europeo se reúne en Bruselas para avanzar en el acuerdo con Turquía.
Son miles. Las hemos visto en nuestras televisiones siendo gaseadas y pateadas. Se estima que unas 10.000 personas refugiadas, solicitantes de asilo y migrantes se encuentran atrapadas en Grecia, en la frontera con Macedonia, en condiciones terribles. Familias, niñas y niños pequeños, personas con discapacidad y mujeres embarazadas sin acceso a la protección a la que tienen derecho debido a una política arbitraria y discriminatoria de cierre de fronteras. Con dificultades para conseguir agua o alimentos y durmiendo al raso en pleno invierno. Este punto de la frontera es un botón de muestra de lo que sucede en Grecia. Según las autoridades griegas, hay más de 30.000 personas atrapadas en el país; según la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados, podrían ser 70.000 en poco tiempo.