Son palabras de Davi Kopenawa, chamán de los Yanomami.
¿Qué podemos hacer cada uno de nosotros para sostener el cielo?
No hay tiempo que perder antes de que todo colapse, cada día vivimos rodeados de desastres y atrocidades, y bailamos al ritmo de máquinas, coches, helicópteros y sirenas.
Llueva o haga sol, como ofrenda y como tributo, para soñar o para visitar lugares oscuros, como signo de debilidad o de fortaleza… bailamos en todo momento, buscando un modo de seguir vivos en este mundo que se derrumba.
La coreógrafa y directora Lia Rodriges, una de las artistas brasileñas más aclamadas internacionalmente, nos cautiva con una potente y rítmica creación: Para que o céu não caia.
La coreógrafa y directora Lia Rodriges, una de las artistas brasileñas más aclamadas internacionalmente, presenta una potente y rítmica creación, 'Para que o céu não caia'.
Se trata de una propuesta escénica de pequeño formato, unas setenta personas, en el escenario, de pies o sentados en el suelo la mayoría, con unas pocas sillas para el público más anciano, muy cerca de los bailarines que integran la Lia Rodrigues Companhia de Danças, en determinados momentos a centímetros. sintiendo el espectáculo casi desde dentro.
Sin duda un espectáculo muy especial, nada común ni parecido a lo que estamos acostumbrados.