Inés Arrimadas ha hecho lo que tenía que hacer; de hecho, y probablemente, lo único que podía hacer ya si quiere intentar que Ciudadanos sea un partido con entidad propia, no "el socio del PP" allá donde exista.
Albert Rivera, seguramente el peor político y estratega de la historia postfranquista, dilapidó en segundos un poder institucional muy grande al aliarse con la ultraderecha de Vox y la derecha del PP en una foto en la Plaza de Colón de Madrid que hoy debe de ser la peor pesadilla de Arrimadas -aunque nunca estuviera allí- junto al Parlament que llenó un día de asientos naranjas sin pena ni gloria.
O Arrimadas intenta lo del partido de centro liberal -aun con escasas garantías de éxito dado el estado del partido enfermo- o desaparece como UPyD; y eso, hoy, comienza por desvincularse de Vox.
Quizás ostentar la Presidencia de Murcia, quizás la de Madrid y veremos si la de Castilla y León, insufle algo de oxígeno a Ciudadanos; el poder siempre ayuda, incluso prestado.
pero la razón mucho mejor es que se trata de Wikipedia. Si puedes, dona.”
jueves, 11 de marzo de 2021
Por fín Ciudadanos juega su papel.
Y a Casado solo le "queda" Feijóo.
Esta foto ha pasado a la historia. Con el PP de Casado se rompió el partido por la derecha y surgió Vox. Ahora a roto por el centro del PP rompiendo con Ciudadanos. El curriculum de Casado pasará a la historia popular como el presidente mas desastroso de su historia.
Sin Ciudadanos a su lado, ¿qué le queda a Pablo Casado?
¿Qué le queda a la calle Génova antes de ser deshabitada completamente?
Primero, un número dos, su mano derecha, secretario general Teodoro García Egea, fracasado en su tierra: no ha podido evitar la moción de censura en la Murcia que le parió.
Segundo, una Isabel Díaz Ayuso que echa a su partido -de casi toda España- en brazos de la ultraderecha, no solo del partido Vox, sino de la ideología más radical.
Y en tercer lugar, a Casado y al PP les queda Alberto Núñez Feijóo, que no se habría presentado a las últimas elecciones en Galicia si no viera posibilidades de irse a Madrid como líder por aclamación, que es para él, la única forma de irse; a hombros de dirigencia y militancia.