El poco discurso político que siempre tuvo Toni Cantó fue un discurso contra la chiringuitocracia. Así que no hay castigo mayor que el de que le ofrezcan una oficina nueva para defender el idioma español en Madrid, y no hay penitencia más grande que tener que aceptarlo.
A los que ya nos parecía duro tener que defender que el español no estaba desapareciendo en las comunidades históricas Ayuso nos pone a defender que el español no corre peligro en Madrid.
Como provocación es una genialidad. Gratis haría gracia. Cuando la broma cuesta 75.000 euros al año el único español que va a mejorar este tiempo es el malsonante.
Así que sí, se enriquecerá el idioma.
Así que sí, se enriquecerá el idioma.