Resulta que en el PP , una vez más, sin disimulo alguno, sin hacer ni el paripé de que se consulta a las bases o a la afiliación, sin ninguna intención de ocultar cómo les gusta realizar las asignaciones de cargos públicos, el "dedo" ha sido dirigido hacia la cabeza de la Sra. Quiroga y la han nombrado sucesora del actual, y cansado de serlo, presidente pepero vasco.
Quiroga siempre que ha tenido oportunidad nos ha recordado sus fuertes creencias religiosas, de carácter muy conservador y radicalmente católico. Resulta curioso porque, si mal no recuerdo, su secretario general declaró, hace no mucho tiempo, su homosexualidad y, sin duda, esa variedad de posturas, solo podrá resultar positiva y síntoma de que el partido de la gaviota recoge, desde su conservadurismo, posturas y formas de ver la realidad bastante diferentes, más de las inicialmente ellos mismos parecen a veces dispuestos a admitir, lo que me lleva a pensar, ya que soy de carácter fundamentalmente optimista, que al comprobar su abanico interno y saberlo llevar con dignidad, hacerlo con el mucho más amplio de la sociedad en la que están insertos, les costará menos esfuerzo hacerlo, sería bueno para todos.