La semana pasada un amigo quería apostarnos que a lo largo de esta semana en Euskadi se decretaría la "mascarilla obligatoria". Nadie le entró a trapo por la sencilla razón de que todos entendíamos que si no se había aprobado la medida "ya" era simple y llanamente por las elecciones del fin de semana y que, una vez celebradas, la decisión se tomaría sin mucho tardar. Así ha sido.
Es una pena constatar que determinadas medidas sanitarias se tomen en función de las políticas.
Es una pena constatar que determinadas medidas sanitarias se tomen en función de las políticas.