Odón Elorza deja entrever en unas declaraciones suyas durante esta semana post elecciones que no son buenos los resultados para su formación y apunta a que ésta podría haberse "asfixiado" por, precisamente, el acuerdo de gobierno con el PNV. Pero, en mi opinión, por otra parte, ahora es cuando no tienen más remedio que seguir coaligados en el Gobierno vasco.
La salida sugerida por Mendia de volver a un pacto de legislatura, después de gobernar cuatro años juntos, requeriría, según Kepa Aulestia hoy en El Correo, explicaciones que los socialistas no están en condiciones de darse ni a sí mismos. Y estoy de acuerdo. En estos momentos, con las circunstancias actuales, no es posible.
Mucho menos una vez que parecen haberse disipado los nubarrones de un nuevo intento soberanista por parte del PNV. Y éste solo podría estar interesado en gobernar en solitario si viera conveniente -o cuando menos posible- la alternancia a muy corto plazo en Madrid. Todo lo contrario, los jeltzales necesitan amarrar a Sánchez, no sea que éste les relegue en sus variaciones geométricas. Y también por eso necesitan que los del PSE continúen en Lakua.