A tenido que llegar el Covid-19 para que la repugnante y guarra actitud de escupir resulte punible.
Hasta ahora los deportistas profesionales, y los que se creían que lo eran, escupían al césped o al suelo con la excusa de que también sus ídolos lo hacían y porque era típico y tópico de grandes estrellas.
Hasta ahora los deportistas profesionales, y los que se creían que lo eran, escupían al césped o al suelo con la excusa de que también sus ídolos lo hacían y porque era típico y tópico de grandes estrellas.
Se acabo. A partir de ahora será simplemente una guarrada y el que necesite escupir que haga como los fumadores educados. Que se lleven en el bolsillo su escupidero/cenicero particular.