en la que elegiremos el nuevo Parlamento Vasco.

miércoles, 20 de mayo de 2020

Las provocaciones de las derechas, su kaleborroka y las moscas.

Que el Gobierno no quiera responder a esta provocación política, me parece bien. Ante estos desbarres continuos, debe reaccionar con sentido común y moderación, apelando a la unidad y a la no confrontación ciudadana, sobre todo. Es lo más inteligente. No creo que haya que mandarles los antidisturbios aunque estén vulnerando las normas de confinamiento y el propio Estado de derecho. Lo mezquino no puede tener ni una pizca de épica.

Pero los dirigentes que alientan estas protestas tan antipatriotas como infames, sí deberían sufrir todo el peso de la ley. Me refiero a dirigentes del PP y VOX, que, mira por dónde, están embarcados no en una guerra patriótica sino en una vulgar kaleborroka:
Los
 Espinosa de los Montero-Monasterio y algunos diputados de las dos formaciones políticas han participado en estos actos contra la salud pública. 
Isabel Díaz Ayuso, amenazando al Gobierno, echándole gasolina al fuego de las protestas y pasándose por el forro de la falda la Constitución, 
abandera una desescalada a las bravas sin preocuparle lo más mínimo que un desconfinamiento veraniego prematuro de madrileños –y barceloneses- puede expandir el bicho desde Finisterre a Punta Europa en menos tiempo que ella resuelve cuánto son dos más dos. Que le pregunten a los ciudadanos de Castilla-León.

blogs.publico.es/jorge-bezares
En fin, Ayuso y sus conmilitones gamberros me recuerdan a las moscas de Antonio Machado, posadas sobre esa ‘milla de oro’: 

"Vosotras, las familiares
inevitables golosas,
vosotras, moscas vulgares
me evocáis todas las cosas"