Estados Unidos no se ha rebelado contra la deriva moral de los últimos cuatro años, la depreciación de su democracia ni la mala educación que ha contaminado la Casa Blanca, pero su hasta ahora presidente ha perdido, y se tendrá que ir a su torre de marfil, con su opera bufa incluida..
Un dirigente que ha utilizado el cargo para enriquecerse, que siente fascinación por los dictadores y desprecia la verdad de forma sistemática. Más de 22.000 mentiras o afirmaciones falsas desde que comenzó su presidencia, según el recuento de ‘The Washington Post’, ha estado a punto de repetir. La calidad democrática de gran parte de la ciudadanía que vota republicano queda en entredicho, pero por lo menos, es minoritaria con respecta a la demócrata.
Estas elecciones eran más un plebiscito sobre su figura una apuesta entre dos visiones del mundo. Parece que ha ganado la mas favorable al diálogo interracial y con otros países, al respeto al medio ambiente, a la ciencia, a las mujeres, etc ...
En definitiva, podemos felicitarnos.
En definitiva, podemos felicitarnos.